Preparación para maratones con disciplina y fuerza de voluntad
Cómo preparar tu primer maratón

¿Te ha pasado alguna vez que te propones un reto y sientes mariposas en el estómago solo de pensarlo? Pues eso justo me pasó cuando me decidí a correr mi primer maratón. Y, aunque suene loco, es una de las experiencias más emocionantes y reveladoras que he tenido. Así que, si también te ronda la idea de prepararte para tu primera maratón, quédate por aquí. ¡Vamos a descubrir juntos cómo hacerlo!

¿Por qué correr un maratón?

Mira, me hice esta pregunta muchas veces, especialmente esos días donde levantarse de la cama para entrenar era un desafío en sí. ¿Sabes qué descubrí? No es solo por correr los 42 kilómetros (aunque parezca eso); hay algo mágico en el trayecto. La preparación te enseña disciplina, paciencia y fuerza de voluntad. Ah, y déjame añadir que la emoción de cruzar la meta es algo que no se puede describir en palabras. Pero, ¿qué tal si te cuento cómo empecé?

Planifica tu entrenamiento

Te cuento algo: al principio, intenté correr sin un plan y casi me da un ataque. Luego, investigué y me hice amigo de los planes de entrenamiento. Hay toneladas de ellos online, pero te recomiendo uno que se ajuste a tu nivel actual. ¿Eras como yo, que no corría ni para alcanzar el bus? Entonces empieza despacito, con carreras cortas y ve aumentando poco a poco.

  • Empieza con distancias cortas, de 5 a 10 km.
  • Incrementa la distancia semanalmente, pero no más de un 10% para evitar lesiones.
  • Incluye días de descanso, ¡casi tan importantes como correr!

La importancia de la alimentación

Con el paso del tiempo, me di cuenta de que la comida es el combustible. Sin ella, tu cuerpo empieza a quejarse y no hay música motivadora que te salve. Por cierto, eliminar ultraprocesados y disfrutar de comidas más naturales hizo maravillas por mí, y por supuesto, hidrátate como si vivieras en el desierto.

Encuentra tu equipo

Y no hablo solo de ropa, aunque encontrar esos zapatos que parecen hechos para ti es crucial. Me refiero a un grupo de personas que te anime. ¿Sabes cuántos grupos de corredores hay en tu ciudad? Incontables. Además, un buen compi de carreras hace que los kilómetros parezcan metros.

Supera los momentos difíciles

¿Recuerdas esas veces cuando nada sale bien? Bueno, lo mismo pasa al entrenar. Hubo días en los que mi cuerpo decía «no, gracias» y mi mente gritaba lo contrario. En esos casos, escuchar tu cuerpo es clave. ¿Dolores persistentes? Visita a un especialista. Y si la motivación es el problema, a veces un video inspirador o recordar por qué comenzaste es suficiente.

Llega el día de la carrera

Finalmente, después de meses de preparación, llega ese día. Las emociones fluyen como un río desbordado, y es completamente normal. Te cuento que respirar hondo y sonreír hacen magia. Disfruta cada paso, porque es el final de un viaje increíble y el comienzo de otro.

¿Estás listo para tu meta?

En resumen, preparar tu primer maratón es un viaje con altibajos, pero cada paso cuenta. Y ya sabes, cuando cruces la meta, no importa el tiempo que te haya tomado. Solo importa que lo hiciste, que te aventureste en un desafío que pocos se atreven a enfrentar. Mira, estás a un solo paso de hacer historia personal. ¿Te animas?